La Junta regula este servicio de atención a los dependientes para mejorar
la situación de usuarios y empleados.
La Ley de Dependencia presta entre otros, el servicio de
ayuda a domicilio. A partir del próximo enero, todos los trabajadores de este
servicio deberán acreditar tener la cualificación específica para la
realización del mismo.
El certificado de profesionalidad en la atención
sociosanitaria a personas en el domicilio se estableció hace ya dos años como
requisito, sin embargo se dio una prórroga para conseguir que los actuales
auxiliares de la ayuda pudieran obtener esa formación. Será a partir de enero cuando acreditar dicha
formación sea requisito imprescindible, regulado en el borrador de decreto que
ultima la Junta. Se trata, sobre todo, de homogeneizar el sector con calidad y
profesionalidad.
En el borrador citado anteriormente, se establece qué
labores son las que deben realizar los auxiliares. Una ayuda a domicilio de
calidad puede mantener al usuario en su entorno familiar y social y retrasar
así su ingreso en una residencia.
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